Carataunas, el pueblecito de La Alpujarra granadina que ha logrado mantenerse a salvo del coronavirus
Tiene apenas 200 habitantes y, desde que comenzó la pandemia, no se ha registrado ni un solo positivo


Sólo ocho municipios andaluces han estado a salvo del COVID-19: Cumbres de Enmedio, Atajate, Alcudia de Monteagud, Benitagla, Laroya, Cástaras y Lobras
© GTresCarataunas es el municipio más pequeño de La Alpujarra, tanto en extensión como en número de habitantes. Y también es la única localidad de las 176 que hay en la provincia de Granada que ha resistido a la pandemia: desde que comenzó ha logrado mantener una tasa cero de contagios por coronavirus.
Aunque cada vez son menos los lugares que pueden presumir de haberse mantenido a salvo, aún existen núcleos a los que el COVID-19 no ha llegado de forma directa. Uno de ellos es Carataunas: un pueblo ubicado en la parte centro-oeste de la Alpujarra en el que apenas viven 200 habitantes. Un honor que comparte con siete lugares más: Cumbres de Enmedio (Huelva), Atajate (Málaga), Alcudia de Monteagud, Benitagla y Laroya (Almería) además de Cástaras y Lobras en Granada.

Las tres localidades granadinas se encuentran en La Alpujarra, una región ubicada en las faldas de la ladera sur de Sierra Nevada que viene a confirmar algo que se ha observado desde que la pandemia comenzó: la Granada rural es capaz de resistir a los contagios. ¿Cuáles han sido las claves para que Carataunas se haya mantenido en este grupo desde el principio?
Tres motivos
Se trata de un lugar que está fuera de los circuitos turísticos más transitados de La Alpujarra granadina. Un pequeño municipio en el que no existen comercios ni bares: sus habitantes compran todo aquello que necesitan gracias a los distribuidores que les visitan cada semana. Cuando esto ocurre, las autoridades se encargan de desinfectar de forma más intensiva todos los espacios públicos por los que pasan y donde se reúne la población.

No es la única razón gracias a la cual han conseguido mantener una tasa cero de coronavirus. Los diferentes confinamientos han ayudado al aislamiento natural de los vecinos que, además, han puesto especial cuidado a la hora de respetar las normas: no se quebrante el distanciamiento social y siempre usan la mascarilla. En este sentido, el consistorio local ha facilitado material a todos los ciudadanos que lo han pedido y han repartido pequeños botes de gel hidroalcohólico entre la población.
Medidas que ya están complementando con la campaña de vacunación. Todos los vecinos de Carataunas que tienen más de ochenta años han recibido las dos dosis del correspondiente inoculante. Ahora, el resto de sus habitantes esperan, pacientes, que llegue su turno para no quebrantar ese escudo anti-coronavirus que han preservado desde el inicio de la pandemia.
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