Pfizer, Moderna y Oxford-AstraZeneca: ¿qué vacuna se asignará a cada grupo?
Muchos se preguntan cómo se llevará a cabo la administración cuando España disponga de todas estas dosis


La vacuna desarrollada por Moderna ofrece una eficacia del 94,1 por ciento frente al coronavirus
© GettyImagesLa primera en llegar fue la de Pfizer, Moderna acaba de recoger su relevo y se espera que la de Oxford AstraZeneca no tarde demasiado: la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) tiene previsto emitir su juicio a finales de enero y si obtiene luz verde, la Comisión Europea no tardará en aprobar su comercialización. Ante tanta variedad, ¿qué vacuna se asignará a cada grupo de población?
La Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH) ha explicado que el mejor inoculante es el que se pone. Todas las dosis que están llegando a España tienen una elevada eficacia frente al coronavirus y no habrá discriminación por grupos: se administrarán en función de la disponibilidad que haya.

Los niveles de eficacia
Si el contexto fuera diferente y hubiera vacunas de sobra se podrían establecer criterios de aplicación, pero no es el caso del COVID-19. Por ahora, los ciudadanos españoles no tendrán la posibilidad de elegir la inyección que le van a administrar y, además, su aplicación se hará de manera aleatoria para evitar desigualdades.
Las autoridades sanitarias han recordado los altos niveles de eficacia de los dos inoculantes que ya están disponibles en nuestro país: la de Pfizer alcanza una eficacia de hasta el 95 por ciento y la de Moderna ofrece un 94,1. ¿Qué ocurre con la desarrollada por la Universidad de Oxford y la farmacéutica AstraZeneca? Los resultados publicados hablaban de una horquilla que iba desde el 62 hasta el 90 por ciento, pero se trata de datos que no se pueden emplear determinantemente.

El ejemplo de Reino Unido
Teniendo en cuenta la disponibilidad actual, está previsto que la administración en las residencias se haga de la mano de Pfizer: según lo establecido, la vacunación se completaría esta misma semana y son las únicas dosis disponibles. Teniendo en cuenta que la de Moderna acaba de aterrizar, todo apunta a que esta última y la primera serán las que reciban los sanitarios de hospitales y centros específicos.
Reino Unido es un buen ejemplo para comprobar cómo se administran las vacunas cuando se dispone de dosis de diferentes orígenes. Desde hace varias semanas se han inoculado más de dos millones y medio de vacunas sin diferenciar entre el antídoto de Pfizer y el de Oxford y AstraZeneca, que, además, se fabrica allí, es más barato y es más fácil de transportar.
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