Así transmite su desbordante energía esta limpiadora de un hospital de A Coruña

La batalla frente al coronavirus es tan incesante que, a veces, podemos perder algo de fuerza. Es en esos momentos cuando surgen personas que nos contagian de su energía desbordante y de su positivismo. Hace pocos días fueron los trabajadores de un hospital los que nos inspiraron al ritmo de Beyoncé y ahora es el turno de una limpiadora de A Coruña. Cada día, antes de ir a su puesto, levanta el ánimo a sus vecinos y las redes sociales… bailando.

Sus imágenes bailando se han vuelto virales. La protagonista se llama Ana, vive en la localidad de A Laracha, trabaja en el Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (CHUAC) y su actuación se ha convertido en un ritual diario. Normalmente tiene turno de noche y sale de casa justo después del aplauso que España dedica a los que, como ella, están en primera línea. Sabiendo que la situación que vivimos es complicada, decidió poner buena cara y un baile al mal tiempo: sus vecinos le ponen música y ella les anima con distintas coreografías.

Son varios los vídeos que hemos visto de Ana. En uno de ellos se mueve al ritmo de una muñeira, una danza popular de origen gallego, y en otro danza al ritmo de música latina. Cuando acaba y tras recorrer la calle de arriba abajo, saluda a sus vecinos, les da las gracias y pone rumbo al CHUAC. Los aplausos de quienes la contemplan en directo no son los únicos que recibe: las redes sociales alaban su actitud, su espíritu y la alegría que desprende y contagia.

Un homenaje al personal de limpieza

Es más, son muchos los que han aprovechado las imágenes para recordar la importancia de la labor que desempeña Ana en el centro sanitario donde trabaja. Han reivindicado el peso que, en esta situación, tienen las limpiadoras y limpiadores de cualquier espacio y, sobre todo, de los hospitales recordando que muchas veces se olvidan de ellos.

Su misión siempre es imprescindible, pero en una crisis sanitaria como la del Covid-19 es aún más importante ya que todo debe ser continuamente desinfectado y para ello, se exponen de forma continua al riesgo de ser contagiados.