Pocas veces en el deporte se dan casos de juego limpio tan extremos como el que acaba de ocurrir en el Mundial de Piragüismo en Portugal: Javier Hernanz ha terminando colgándose una medalla de bronce inesperada porque su rival noruego, que la había ganado en la carrera, renunció a ella tras admitir haberse saltado una boya. Su tercer puesto en el mundial es todo un logro que Hernanz, novio de la nadadora Mireia Belmonte, dice haber perseguido durante 35 años, pero que no es comparable, según cuenta él mismo en su perfil de Instagram, a la inmensa lección deportiva que transmite el gesto de su compañero noruego, al que está muy agradecido.
Javier Hernanz, en una foto tras un entrenamiento (Instagram).
En la final de los 5.000 metros del K1, Hernanz entró cuarto en la meta. Inicialmente, los jueces descalificaron al tercer clasificado, Eivind Vold, por haberse saltado una boya, pero después decidieron otorgársela, por lo que fue el noruego el que subió al podio. Sin embargo, no todo estaba escrito. El piragüista que acababa de ganar nada menos que un bronce en un Mundial revisó el vídeo de la carrera y habló con su federación. Renunciaron al metal y pidieron que le fuera otorgado a Javier Hernanz, un gesto de deportividad que elogia todo el mundo, empezando por el propio piragüista español, que ha compartido su alegría y su agradecimiento a Vold en sus redes sociales:
El piragüista, que también es popular en España por haber participado en el concurso de televisión 'Bailando con las estrellas', sabe que si no fuera por la renuncia del noruego no sería el dueño de la medalla, puesto que los jueces habían rectificado la descalificación inicial, y es más consciente que nadie de la enorme honestidad que significa renunciar a un premio por el que se lucha tan intensamente, al que se dedican horas y horas de duro entrenamiento y que supone que tu nombre quede escrito en la historia del deporte.
Javier Hernanz junto con Mireia Belmonte (Instagram).
El piragüista noruego también ha publicado un mensaje en Instagran acompañado por una foto con Javier Hernanz en el que dice: "Ayer gané una medalla en el mundial por haber quedado tercero en 5.000 metros. Al principio fue descalificado, pero los jueces decidieron finalmente darme la medalla. Después de ver el vídeo de la carrera descubrí que los jueces habían tomado la decisión correcta al descalificarme, que en el fragor de la carrera me salté una boya que no vi. Estoy muy feliz con mi actuación, pero sé que la medalla pertenece a mi amigo español Javier Hernanz. Felicidades, compañero, y gracias a todos los que me han felicitado".