El nuevo reto de Jeff Bezos: la búsqueda del elixir de la eterna juventud

Jeff Bezos, fundador de Amazon, no solo es el hombre más rico del mundo, sino también un excelente inversor con un gran olfato para los negocios. Además de emplear parte de su fortuna para financiar su particular compañía de viajes espaciales (Blue Origin) y de haberse hecho con un gran patrimonio inmobiliario adquiriendo, entre otras propiedades, una exclusiva mansión en Beverly Hills, tres pisos en una de las zonas más caras y lujosas de Nueva York o un impresionante rancho en Texas, Jeff ha invertido parte de su capital en numerosas startups como Airbnb, Uber, Plenty, General Assembly, MakerBot Lookout o Nextdoor. Pero si hay un sector en el que el CEO de Amazon ha decidido invertir su dinero ese es el de la salud y concretamente en aquellas compañía que estudian retrasar el envejecimiento.

Dispuesto a encontrar el secreto del elixir de la juventud o, en su defecto, la receta para aumentar la longevidad, Jeff ha decidido confiar parte de su dinero a algunas empresas emergentes, que hoy en día destinan todos sus esfuerzos en mejorar ( y en muchos casos alargar) la calidad de vida de las personas.

Así, recientemente, el hombre más rico del mundo depositaba su confianza y su dinero en Mindstrong Health, una compañía que ha desarrollado una app para rastrear el estado de ánimo y la cognición de los usuarios, con el objetivo de identificar los primeros signos de depresión u otros problemas de salud mental. MIT Technology Review describió Mindstrong Health como “la aplicación para teléfonos inteligentes que puede decirle que está deprimido antes de que usted mismo lo sepa”.

Pero esta no ha sido la única empresa dedicada a la salud por la que Bezos ha apostado, ya que también ha depositado cerca de casi 115 millones de euros en Juno Therapeutics, una compañía que está ya liderando ensayos clínicos para desarrollar inmunoterapias para el tratamiento del cáncer. Su trabajo está dirigido especialmente a pacientes de enfermedad avanzada que no han tenido éxito con la quimioterapia, la radiación o los trasplantes, extrayendo de su cuerpo las células T que combaten las infecciones y el cáncer. A partir de ahí, la ingeniería genética se utiliza para hacer que la célula T reconozca el cáncer específico de esa persona con el objetivo de regresarla de nuevo al cuerpo para que pueda reconocer el tumor y, con suerte, acabar con él.

Además, Bezos también ha apoyado económicamente a la empresa Unity Biotechnology, dedicada a diseñar medicamentos y tratamientos que pueden hacer detener el envejecimiento. Fundada en 2009 por David y un grupo de profesores de ciencias biológicas, la investigación de Unity Biotechnology se centra en particular en las células senescentes, o lo que es lo mismo, las células más viejas que han dejado de dividirse y que parecen ser una de las causas de la aparición de las enfermedades asociadas con el envejecimiento.

Pero no contento con estas inversiones, Jeff Bezos ha ido un paso más allá y también ha depositado su confianza y su dinero en dos compañías mas: Grail y Nautilus Biotechnology. La primera de ellas tiene como propósito es desarrollar un único análisis de sangre con el que detectar varios tipos de cáncer antes de que aparezcan los primeros síntomas; mientras que la segunda está dedicada principalmente a construir un dispositivo que pueda rastrear las proteínas de los pacientes de manera más rápida y económica para permitir a los desarrolladores de medicamentos utilizar esos datos y encontrar tratamientos específicos para enfermedades como el cáncer y la esclerosis múltiple.